El último estudio de la consultora Mercer, sobre pagos y remuneraciones, muestra un par de datos que, ante los acontecimientos ocurridos en el país en las últimas semanas, no pasan desapercibidos:
En Chile, en promedio, el sueldo de un gerente general supera en 30 veces al de sus operarios.
A su vez, dicho sueldo puede llegar a ser hasta 47 mayor al sueldo mínimo.
En un contexto en el que se reclama, entre otras cosas, mayor igualdad, estas cifras son parte del vaso que se rebasó con una gota de 30 pesos.
En medio de todo lo que ha ocurrido, surge una iniciativa que invita a pasar del diagnóstico a la acción.
Cristián Mackenna, director ejecutivo de la agencia Contingente, explica con lujo de detalles qué es el Desafío 10X.
¿De qué va Desafío 10X?
«Es una invitación voluntaria; celebramos al que hace un mayor esfuerzo y contagiamos a quienes no habían pensado en esto».
Así presenta Mackenna el Desafío 10X, iniciativa que nace de un grupo de Empresas B y empresarios pertenecientes al G100.
Básicamente, este desafío invita a las empresas a:
Reducir la diferencia entre sus sueldos máximos y mínimos a solo 10 veces y/o fijar un sueldo mínimo de 22 UF bruto.
«Esto [Desafío 10X] parte de conversaciones y esfuerzos desde hace mucho rato de distintas organizaciones; ahora la contingencia permite que sea masivo y todos se den cuenta del problema«, explicó Mackenna.
Además, resaltó que con Desafío 10X «no queremos obligar a nadie, ni queremos cambiar leyes».
«Podría ser súper costoso que, de un día para otro, a alguien se le ocurra cambiar el sueldo mínimo al doble», aseveró Mackenna, recalcando el carácter voluntario de Desafío 10X.
De expectativas discretas al éxito inesperado
El lanzamiento de la iniciativa se dio debido a la coyuntura actual. En parte, el éxito se debió a eso.
«Cuando conversaba con miembros del G100, del Sistema B, no más de 26 empresas prendieron con la idea», contó Mackenna.
Pero, tras el lanzamiento, se empezaron a sumar alrededor de 200 empresas por día.
Del 22 al 28 de octubre, primera semana del Desafío 10X, mil empresas se sumaron a la iniciativa.
A la fecha, más de 1.200 han asumido el desafío, lo que significa que unos 30.700 empleados se verán beneficiados.
«Antes de lanzar la página, algunos comentarios eran ‘oye, esto es medio ingenuo’«, comenta Mackenna.
Sin embargo, «fue tan rápida la respuesta positiva que esa ingenuidad los datos nos demuestran que no era tal«, añadió.
El éxito inesperado obligó a quienes impulsan esta iniciativa a cambiar su hoja de ruta inicial.
Por otro lado, en un encuentro llevado a cabo en CasaCo, en el que participaron las primeras empresas en sumarse al desafío, se definieron varios grupos de trabajo, pensando en el devenir del proyecto.
«Más allá de que haya sido impulsada por Contingente, queremos que sea una iniciativa lo más colaborativa y compartida con las empresas que confiaron en un primer minuto», señaló Mackenna.
Explicó que entre las áreas que se formaron hay:
-Gobernanza y financiamiento
-Comunicaciones y marketing
-Reglas del juego
-Verificación y tecnología
«El objetivo es sumar la mayor cantidad de empresas; nuestra meta es de 10.000 de aquí a un año», afirmó.
Además, Mackenna explicó que con lo que se resuelva de estos grupos «queremos pensar en verificación, canal de denuncias», entre otras cosas.
Construyendo una fuerza de empresas comprometidas
Aunque en un principio se vea ambiciosa, la meta que comentaba Mackenna es el principal propósito de Desafío 10X.
«Hay más de 300.000 empresas en Chile, necesitamos contagiar a más para que esto sea una realidad», agregó.
El encuentro en CasaCo, detalló, le dejó muy feliz porque me hubo «señales de que por todos lados se puede».
«Si se suman más empresas y generamos un movimiento con potencial de cambio estructural, al final se reduce la desigualdad […] Haber sumado más de 1.000 empresas me deja muy esperanzado. Podemos construir juntos una fuerza de empresas comprometidas con esta y más cosas«, puntualizó.
Toda la información sobre cómo ser parte de esta iniciativa está disponible en este link.